Primer acto, el barco se hunde.

El tronco, que todavía no es tronco, quién por ahora sólo es rama, quién luego, más adelante, será Ramiro Gastón, pero por ahora dejemos que el bucle sea bucle, y el lacio lacio, rama, no es el tronco, ni Ramiro Gastón, sino rama, y está ahí, sólo, llorando detrás de la puerta que divide el cuarto de chicos con el de chicas, en la fundación bb. llora, desolado. Se ahoga en su mar de lágrimas. Se rompe. Llora su amor imposible, mar. Ahí, solito. Y ahí, llega ella, también, llorando, sin verlo, mar. Lloran, ambos en silencio. Ambos, sienten que sus vidas se hunden, ambos por amores que parecen imposibles. Uno tiene la certeza que sí lo es. Ella no es para él. Al menos, ese tipo de amor… se ven, se miran, se contienen. Ella aún no sabe, ni sabrá que él está profundamente enamorado de ella. Ella llora porque Barto montesco le prohíbe concretar con Thiago Romeo. Amores imposibles. Barcos que se hunden en la más oscura y peligrosa profundidad: la fundación bb… hay amores que matan y otros que salvan… el amor incondicional es un gran salvavidas.

Segundo acto, el salvavidas.

Siempre que llovió paró, y si no paró hay que hacer como hacen en europa, y el tronco que todavía no es tronco pero ya lo va a ser, lo sabe: si llueve y no paró, hay que esperar a que pare, y mientras, aguantarse la tormenta… el barco se hundía, y había peligro de ahogarse. Rama amaba y sufría en silencio. Marianegra Julieta, para salvar su vida tuvo que hundir su relación con Thiago Romeo. Alelí, la hermana del tronco por ahora no tronco, vive una pesadilla en esa casa. Y así, todos y cada uno de los chicos. Su vida es un Titanic, a la deriva, a punto de estrellarse. Todo los separa. Pero algo, los va a volver a unir. Rulo va, rulo viene, haciendo una elipsis uno se entretiene: eso que los une, es un amor incondicional, la amistad… y lo que hilvana la amistad, es la música… la música será su salvavidas…. la música desplegará miles de aventuras, con finales felices, y otros no tanto.